domingo, 29 de diciembre de 2013

LOS NIÑOS NO VIENEN DE PARÍS



Los niños no vienen de París o la dificultad de ser madre a partir de los 40!!







PARIS, 2013©Gloria Giménez
Si, los niños no vienen de París. Hace más o menos 40 años que ya se dejó de decir a los más pequeños que sus hermanitos venían de París, quizás por eso fue siempre una ciudad soñada, ciudad de las luces, también de los sueños. 

Como cada año, fuí a PARIS PHOTO, una gran muestra fotográfica de los proyectos fotográficos más recientes en el mundo del coleccionismo fotográfico y a la vez, podemos también admirar fotografias vintage. Los fotógrafos profesionales, estamos seducidos por este tipo de muestras, en las que las mejores galerías del mundo presentan sus colecciones a la vez que también a los fotógrafos que representan.
Paralelamente los fotógrafos podemos mostrar también nuestras obras a galerías con la esperanza de que el próximo año podamos también ver expuestas nuestras obras. Sí, París sigue siendo la ciudad de la luz, de la fotografía y la de los sueños.


La Fallete, 2013 ©Gloria Giménez




Hace tan solo 15 días nuestros sueños están mucho más cerca, gracias a que en mi Ciudad Barcelona, se ha conseguido enlazar a través del cordón umbilical de las vías ferreas  la ciudad que durante muchas décadas nos surtía a través de una cigüeña voladora todos los niños que pueblan nuestras escuelas.










Saint-Germain-des-Prés, París, 2013. © Gloria Giménez




Los sueños de las cigüeñas voladoras, provenientes del soñado París, no siempre llegaban a su destino, por ello, la Ciencia, al igual que los trenes, nos devuelven la oportunidad de que nuestros deseos y ilusiones estén mucho más cerca.


En Barcelona, la sociedad actual,  es una sociedad avanzada y las leyes hasta la fecha se han abierto a los conocimientos científicos para poder llegar a algo tan deseado como puede ser el     hecho de ser madres y dentro de este concepto todas las posibilidades de las nuevas parejas entre iguales o distintos sexos y nuevos vínculos relacionales. 

Sí, Barcelona es una ciudad cosmopólita, de avances médicos y científicos, donde grandes apellidos, reconocidos en el mundo científico, han sido pioneros desde hace ya más de 20 años de tratamientos de fecundación,

Sí, lo sabemos, los niños ya no llegan de París, los sueños de ser madres o padres y conseguir llevar a término un embarazo deseado o tener un hijo en común con nuestra pareja, ahora tiene nombre:

Fecundación in vitro, donación de óvulos, donación de esperma, transferencias embrionarias, adopciones, etc.......................................todo un léxico complejo para un solo fin:


conseguir llevar a término un embarazo deseado o conseguirlo  a través de un proceso de adopción

Pero, en ocasiones, la lucha por obtener y llegar al objetivo final ha sido más larga de lo esperado, frustrante y ha dejado de lado muchas emociones y sentimientos que quizás incluso hemos ido perdiendo durante el camino o se disfrazan de sombras oscuras, de blancos y negros y que afloran cuando menos los estamos esperando, quizás cuando ya hemos conseguido nuestro sueño.





Carrousel del barrio de Montmartre, 2013 © Gloria Giménez




El proceso de fertilización in vitro produce un sinfín de emociones como la frustración, la desilusión, el dolor y la pérdida de esperanza, pero también el entorno social que sin proponerselo, cuestiona a la futura gestante, generando una lesión en su autoestima. Por otro lado, en el caso de parejas del mismo sexo, existen problemas en asimilación del concepto de embarazo por la pareja no gestante.
Tampoco es fácil en el óvulo donación, vivir el hijo como propio, la idea mental a nivel consciente es asimilada, pero el sentimiento de vínculo, en ocasiones, deben de pasar por un tratamiento psicoterápico para reencontrar esas emociones positivas.
El vínculo durante el embarazo :






Bebé cargado en la espalda de su madre, Isla Goré.Senegal, 1993©Gloria Giménez

La reproducción asistida, nos convierte en madres, pero la lucha para conseguirlo, ha dejado en el trastero la emoción de tenerlo. Pero también ocurre este tipo de problemas en las adopciones, la ilusión en la consecución del bebé, deja en ocasiones,  de lado la emoción del vínculo.

Primeras experiencias del neonato y el vínculo "materno":

Cuando viajé a Senegal en 1993,  pude ver las imágenes que tantas veces hemos visto en fotografías y reportages, de madres porteando a sus bebes a la espalda, pero lo que no nos planteamos, es que muchas de las veces, no son sus propias madres, sino hermanas o mujeres familiares que portean a los bebés, ya que la madre puede estar porteando otro bebé que haya tenido 10 meses antes.

Los vínculos que genera el "portear" un bebé o un niño pequeño, puede crear vínculos parecidos al de la embarazada, de la madre biológica? Sí, los vínculos no siempre van relacionados con el cordón umbilical, ya que se crean con el contacto físico y visual de la "madre porteadora" y el bebé.


Niño pequeño, porteado por su hermana a la espalda, Senegal, 1993©gloriagiménez






Si, lo sabemos, los niños no vienen de París, pero si pueden ser un sueño convertido en realidad gracias a la ciencia. De la misma forma que los sueños nos llevan a París, cada vez de una forma más rápida, los sueños de ser padres a las parejas no fertiles, están también más cercanas. Y cuando ya tenemos a ese bebé tan esperado y nuestras emociones vinculares conectadas, entonces es cuando debemos trascendir de nosotros mismos para dar nuestra entrega máxima en esa primera etapa del recién nacido.


























La importancia de los primeros tres meses de vida del bebé:




atadura tradicional del porteado a la espalda, Senegal 1993.©gloriagiménez

Los primeros meses de vida, en las madres primerizas y con edades que sobrepasan los 35 años, no están exentas de ansiedades y en ocasiones exceso de perfeccionismo, llegando a obsesionarse con el cuidado del recién nacido. El conocerlo y saber distinguir sus necesidades de lo que son nuestras ansiedades, es un proceso que requiere en ocasiones, la ayuda de un profesional. 

Es un trabajo maravilloso, que en mi experiencia profesional como psicóloga y especialista de neonatos y primeras etapas del niño, realizo cotidianamente en mi Gabinete de Psicología, con más asiduidad en estos últimos cinco años. Sí, los niños no vienen de París, llegan a nosotros, después de largas esperas, desilusiones, sueños rotos, pero al fín....llegan.


Es importante el proceso de nuestra espera, saber esperar es también una ciencia.




Café de Flore, Boulevard Saint Germain, Paris 2013©GG


Tomarnos el tiempo necesario, reconocer nuestras emociones, proyectar la ilusión y nuestro sueño para el final del camino.


Todos los trenes llegan, París está ya muy cerca de nosotros, de nuestros sueños......todo al fín llega.

Y como dice Karl Lagerfeld:
"No tienes que ser francesa para ser parisina"







Dedicado a E. , una madre en espera.


Gloria Giménez, Psicóloga, psicoterapeuta acreditada Europsy, fotógrafa. ®©